La muestra del artista Andrés J. Naranjo reúne una serie de dibujos y esculturas que pretende hacernos reflexionar sobre la condición del ser humano ante situaciones personales, o bien a través de conflictos por medio de agentes externos. Los personajes quedan expuestos, frágiles, cargando objetos pesados que imposibilitan sus movimientos físicos así como sus ambiciones u objetivos personales.
El artista intenta representar alguno de esos momentos en nuestra vida en el que nos hayamos tenido que enfrentar a una gran presión, carga, preocupación o trauma, y como respondemos a esas situaciones bien a través de la resistencia defendiendo nuestros intereses o por el contrario sucumbiendo o cediendo ante las presiones impuestas.
En una de sus series escultóricas basada en la fusión de lo humano con elementos pétreos (como los cantos rodados) uno puede encontrar el paralelismo con episodios mitológicos como el del rey Sísifo, castigado a empujar una piedra hasta la cima de una montaña una y otra vez. En este caso el castigo eterno de Sísifo se traslada a nuestra sociedad y a nosotros como individuos, donde cada uno cargamos con nuestra propia piedra en ciertos momentos de nuestra vida.
Las esculturas que el espectador puede encontrar en la muestra han sido íntegramente materializadas por su autor, siendo destacable el vínculo existente entre éste y la técnica de fundición artística. Andrés J. Naranjo con la inestimable colaboración de Lolita Paz han conseguido sacar buen provecho de las posibilidades cromáticas que el metal fundido ofrece a través de la pátina.
El escultor a través de sus pequeñas creaciones, nos anima a pensar que en un momento de ansiedad o crisis también puede ser posible crear algo que valga la pena.
El objetivo es empatizar con el observador; buscar las coincidencias con éste y crear un vínculo empático, y en este sentido el formato –un formato bastante más reducido del acostumbrado en las obras escultóricas- ha sido una constante intencionada por parte del autor. El pequeño formato demanda un acercamiento por parte del observador. Nos vemos obligados a aproximarnos a las piezas y de esa forma se acercan también más a su contenido discursivo.
Andrés J. Naranjo es Doctor en Bellas Artes y profesor dentro del Departamento de Dibujo de dicha Facultad en la Universidad de Sevilla e investigador del grupo HUM552: Artana (Plástica y Arte Anatómico). Cuenta en su trayectoria como artista con la creación y responsabilidad del “Proyecto Escultórico Ernesto Cardenal” (2013), financiado por la Universidad de Huelva, y la presencia de su obra en diferentes exposiciones colectivas entre las que destacan: “ROTARTE. Punto de encuentro” (Cádiz), “Venancio Blanco y sus discípulos: Dibujo y escultura en bronce en Priego de Córdoba” (2016), “Masterclass” (2017) organizada igualmente por la galería onubense Espacio Cero o la muestra “Murillo y la Facultad de Bellas Artes.400 años después” (2018) en la Sala Santa Inés de Sevilla, coordinada por la Facultad de Bellas Artes y comisariada por Fernando Infante del Rosal y Marisa Vadillo Rodríguez.
Gustavo Domínguez Moreno.
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